Tan
sabrosa historia,no podía quedar sin que nos diese noticia su autor
dónde se podría hallar lo bien que estuvo. Causóme pesadumbre,
porque el gusto de poder contar esta historia con alegría, se volvía
en disgustos de pensar el mal camino que se ofrecía para hallar lo
mucho que a mi parecer faltaría para poder reflejar como sentir lo
que sentimos los que alli estuvimos de tan sabrosa visita A LA
BODEGA VEGAMAR Parecióme cosa imposible y fuera de toda buena
costumbre, que a tan buen caballero no le hubiese faltado tiempo en
escribir sus nunca vistas hazañas; y no había de ser tan desdichado
tan buen caballero, Y así no podía inclinarme a creer que tan
gallarda historia hubiese quedado manca y estropeada, y echada la
culpa a la malignidad del tiempo, devorador y consumidor de todas las
cosas, dicho lo cual me puse a escribir . Por otra parte, me parecía
que pues entre sus historias se habían hallado tan modernas como
almuerzos,
motos y camiones,
que también esta historia debía de ser moderna, y que ya que no
estuviese escrita, estaría en la memoria de la gente de su aldea y
de las a ellas circunvecinas. Esta imaginación me traía confuso y
deseoso de como contar real y verdaderamente toda la aventura de el
famoso español Don Lorenzo Andante, luz y espejo de la caballería
valenciana, y he decido hacerlo remontándome a... El primero que en
nuestra edad y en estos tan calamitosos tiempos se puso al trabajo y
ejercicio de los andantes repartos, con un carruaje de los llamados
furgonetas y el de des facer agravios, amparar doncellas, de aquellas
que andaban tras un ordenado, dispuestas a favorecer el trabajo de
tan gallardo caballero para que en su lucha diaria en el reparto que
le fuese mas fácil, doncellas como Patri, O Maribel,son tan
responsables y favorables de el bien de aventuras, que sin ellas
muchos son los caminos que me habrian devorado. Pero en esta historia
debo hablar de aquellas que le esperan al finalizar el día, para
poder testificar lo bien terminado que la aventura a quedado, como
son Silvia y Nuria. Digo, pues, que por estos y otros muchos respetos
es digno nuestro gallardo Don Lorenzo de continuas y memorables días
de reparto, y aun a mí no se me deben negar, por el trabajo y
diligencia que puse en buscar como contar esta historia. De esta
agradable historia; aunque bien sé que si el cielo, el caso y la
fortuna no me ayudaran, el mundo quedara falto y sin el pasatiempo y
gusto, que bien casi dos horas podrá tener el que con atención la
leyere. Pasó, pues, el hallarla en esta manera:
DONDE
SE CUENTA , QUE AL SER REPARTIDOR DE VINOS, LA BODEGA ES
IMPRESCINDIBLE VISITAR.
Estando
yo un día en descargas, llegó el licenciado Carlos y me enseño un
correo de la reina Maria ; y como soy aficionado a leer, aunque sean
los papeles rotos de las calles, llevado de esta mi natural
inclinación tomé el correo y lo leí vile con caracteres que conocí
ser de informática, y puesto que, aunque los conocía, no los sabía
leer, anduve mirando si alguien me lo traducía; y no fue muy
dificultoso hallar intérprete semejante, pues aunque le buscara de
otra mejor y más antigua lengua le hallara a el licenciado Carlos.
En fin, la suerte me deparó , que diciéndole mi deseo, y poniéndole
el correo en las manos , me describio que ponia que podria visitar
Vegamar Bodega con los amig@s que yo
quisiese. Díjele que me lo dejase pensar pues debía consultar, pero
probablemente me apuntase.
Mucha
discreción fue menester para disimular el contento que recibí
cuando llegue a la bodega con la compañía y categoría de
caballeros y damas como la de mis amigos. Otras algunas menudencias
había que advertir; pero todas son de poca importancia como el
tiempo, y que no hacen al caso a la verdadera relación de la
historia, que ninguna es mala como sea verdadera.
Si
a esta se le puede poner alguna objeción acerca de su verdad, no
podrá ser otra sino haber sido su autor , que soy yo, un poco
despistado y olvidadizo para recordar todo lo que allí nos
explicaron, que fue mucho y muy variado, pues de cepas de tierras y
de como trabajarla trataron. Siendo muy propio de los de aquella tierra ser los mas atentos, aunque por ser tan nuestros amigos, antes se puede entender haber quedado muy bien en ella: y así me parece a mí, pues cuando pudiera y debiera extender la pluma en las alabanzas de tan buenos compañeros como son los de Disber, habiendo y debiendo ser los historiadores como yo, verdaderos y no nada apasionados, y que ni el interés ni el miedo, el rencor ni la afición, no les haga torcer del camino de la verdad, cuya madre es la historia, emula del tiempo, depósito de las acciones, testigo de lo pasado, ejemplo y aviso de lo presente, advertencia de lo porvenir. En esta sé que se hallará todo lo que se acertare a desear en la más apacible; y si algo bueno en ella faltare, para mí tengo que fue por culpa de no saber expresarme mejor, antes que por falta de lo que allí vivimos.
Manolo
con su flamante carruaje nos llevo de visita por toda la finca, nos
enseño las mejores vistas, y explicaciones de como tratan la uva.
y con las excelentes explicaciones de el caballero D. Manuel, volvemos a la Bodega.
Mar,
la enologa, nos informo de todas las dudas que sobre fermentación
tuviésemos, o de como crear crianzas, robles y el mismísimo cava.
Mientras todos os rincones de la bodega nos hiba enseñando.
venga
luego, que el trabajo y peso de las armas no se puede llevar sin el
gobierno de las tripas. Pusiéronle la mesa en el lugar llamado wine
bar . Carmen, que entre sus muchos trabajos esta el de convertir en
numeros el trabajo de la bodega, en este dia y bien llevado era la
responsable de atender el Wine bar, trayendonos una porción en
forma de bocadillo de buen jamón Ibérico, y un pan tan rico para
mejor amenizar que nos dejo satisfechos con un buen vino tinto de
crianza marca la casa , y era materia de grande risa la que en esos
momentos estábamos disfrutando, pues no hay trozo mejor de el día
que el de en una buena mesa compartir charla con estos grandes
caballeros y damas
y terminada esta aventura no puedo dejar pasar la ocasion de algunos momentos donde he estado con mi nuevo carruaje ,donde los caminos son caprichosos, y te llevan a los sitios que a otros les gustaria llegar, y asi ver lo que yo veo
La Albufera |
Tienda de Torrente. |
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