14 razones para contar con una persona tatuada
Es comprometida
Nada
dice “compromiso” como el tener una imagen estampada a tu cuerpo
de por vida. Cuando se hace una decisión, la defiende. Sabe
que no hay vuelta atrás, sin arrepentirse al último momento y
decepcionar a alguien.
Es
sincer@ con su propio mundo.
Es misteriosa
Hay
un misterio seductor en la historia de su tinta –algo vibrante y
quizás un poco peligroso en los retazos de las imágenes que cubren
su piel.
Es
siempre una pregunta que solucionar y jamás dejará de llamarte la
atención con esa oscura sombra del acertijo.
Puede
ser impulsiva
Aunque
esto usualmente podría verse como algo malo e inmaduro, realmente no
lo es. Simplemente no tiene miedo de cometer errores. Le
gusta tomarse las cosas como vienen y cuando tiene una idea,
solamente rueda con ella.
Es artística
Si
se expresa con tatuajes, definitivamente tiene un lado artístico.
Es romántica
Hay
un cierto aire del romance rodeando a estas personas con tatuajes. No
el romance convencional de Jane Austen, sino algo más oscuro. Uno
apasionado e intenso, imposible de resistir.
Pueden soportar el dolor
Principalmente
son intrépid@s. Un
poco de dolor nunca las va a asustar.
Alguien
que puede soportar una aguja cruzando su brazo por periodos de horas
cada vez en el nombre del arte es un persona digna de ser valiente.
Le encuentra un significado a las cosas
Es
un alma sabia. Incluso en las situaciones más directas y
desenvueltas, puede encontrar significado. Ve
la vida mitad llena y se empapa de poesía. Quizá
no sea fácil de tratar, pero su pasión por la vida es una cosa
exquisita.
No tiene miedo de ser imperfecta
La
imperfección no es un error para éllos. Encuentran la imperfección
incluso más fascinante que cualquier cosa impecable. Ven
la real belleza en las cosas con bordes irregulares, algunas grietas
y piezas faltantes.
Lo perfecto simplemente es aburrido y simple.
Es honesta sobre su pasado
No
tienen nada que esconder y tampoco lo querrían. Pueden haber hecho
cosas en su pasado de las cuales no están orgullosos, pero jamás se
encogerían en vergüenza.
Es
el tipo de persona que reconoce sus errores y los enfrenta. Su
pasado es solo otra parte de la historia que ha ayudado a formarlas
en las personas que son hoy.
Son
sensibles
La
persona tatuada no es propensa a la crueldad y no es de esos que
construyen murallas. Está al tanto de sus sentimientos, incluso si
no se regodea en ellos. Está
inclinada hacia la emoción humana –es una forma de mostrar
personalidad con la cual están cómodas.
Saben lo que quieren
Aún
si es en la abstracción, tienen una visión para vida y su futuro.
Por
mucho que este tipo de personas ame vivir en el momento y
experimentar las cosas a través de todos sus sentidos, de todas
formas tiene sueños y aspiraciones que quiere trabajar para lograr.
Se abren a los extraños
No
tiene miedo de hablar para ser persona y para hacer nuevos amigos de
los cuales aprender. So
abiertas respecto de su vida y fácilmente se encuentran cómodas en
cualquier conversación.
La pinta de personas malas, es sexy
Se
ven como el tipo con el que tus padres te prohibirían salir en la
edad estudiantil. Esto sin embargo, no quiere decir necesariamente
que sea una mala persona. Su
aire de rebeldes sin embargo será por siempre sexy y deseable.
No es extraño a la controversia
Una
persona con tatuajes no es del tipo que cae por las grietas o que
pasan desapercibidas. Son conscientes de la generación anterior a
éllas que piensan que los tatuajes son ridículos y están al tanto
de que piensan que es algun tipo de degenerados. Pero
acogemos la crítica y no nos importa un carajo lo que cualquier
piense.
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