La bodega
(Declarada Monumento Histórico Industrial)
En la actualidad la finca ha sido puesta en
valor y todos los edificios han sido minuciosamente restaurados con materiales
de época, manteniendo su encanto antiguo e industrial. La bodega ocupa lo nave
principal del antiguo taller de laminado. Se trata de un espacio de algo más de
300 m2 con una altura de más de 6 metros que mantiene a la perfección las
características de los edificios industriales de principios del siglo XVIII.
La bodega está equipada con tinas de madera
de roble de 2.000 litros que se utilizan para la fermentación alcohólica y maloláctica.
El envejecimiento se produce en barricas de 225, 300, 500 y 2.000 litros. La
bodega de la Antigua Real Fábrica de San Miguel de Ronda mantiene un compromiso
pleno y completo en todo el proceso de elaboración del vino natural con
criterios ecológicos, no solo en el aspecto agrícola, sino también en el
proceso industrial que se realiza de forma totalmente artesanal.
En la actualidad la finca ha sido puesta en
valor y todos los edificios han sido minuciosamente restaurados con materiales
de época, manteniendo su encanto antiguo e industrial. La bodega ocupa lo nave
principal del antiguo taller de laminado. Se trata de un espacio de algo más de
300 m2 con una altura de más de 6 metros que mantiene a la perfección las
características de los edificios industriales de principios del siglo XVIII.
La bodega está equipada con tinas de madera
de roble de 2.000 litros que se utilizan para la fermentación alcohólica y maloláctica.
El envejecimiento se produce en barricas de 225, 300, 500 y 2.000 litros. La
bodega de la Antigua Real Fábrica de San Miguel de Ronda mantiene un compromiso
pleno y completo en todo el proceso de elaboración del vino natural con
criterios ecológicos, no solo en el aspecto agrícola, sino también en el
proceso industrial que se realiza de forma totalmente artesanal.
La finca dispone de las siguientes variedades:
Pinot Noir (Declarada por la Unión Europea la plantación más meridional de
Europa de esta variedad), Moscatel Morisco, Tintilla de Ronda y Garnacha Tintorera.
La variedad Moscatel Morisco recibió de su
primer año de cosecha 2014 la calificación de mejor vino blanco de Andalucía y
ser reconocido por la guía Peñin 2017 con 93 puntos y ese mismo reconocimiento se
le concedió a la variedad Pinot Noir en la guía Peñin 2017 con 90 puntos. Los
dos son vinos ecológicos y naturales
Iniciadas las obras en 1725, la Real Fábrica
de Hojalata de San Miguel fue la primera fábrica de estas características
fundada en España. Es por tanto el primer alto horno y la primera industria
siderúrgica nacional.
Se eligió como emplazamiento este apartado
rincón de la Serranía de Ronda por su riqueza maderera, indispensable para
obtener el carbón vegetal que se empleaba en la fundición, por la existencia de
minas de hierro superficiales y por la posibilidad de aprovechar la pendiente y
el agua del río Genal para mover las ruedas de la maquinaria.
Además la situación alejada de esta fábrica
se consideró una ventaja para proteger el “secreto” de la fabricación de
hojalata, aunque este factor se convirtió pronto en un grave inconveniente.
Se trataba de una producción con un proceso
integrado: desde el lavado del mineral hasta la terminación y embalado de la
producción (al principio de unas dos toneladas diarias).
Para poder distribuir la producción fue
necesario construir una vía de acceso desde Estepona a través del Jardón y el
puerto del Chaparral, un trazado casi impracticable ya que había que dar
numerosos rodeos para subir atravesando zonas con gran densidad arbórea.
Al principio se utilizaron mulas para el
transporte de mercancías pero pronto tuvieron que ser sustituidos por camellos
solicitados al Real Sitio de Aranjuez, más adaptados y resistentes para llevar
grandes cargas.
* Enlace videoreportaje de Marbella Radiotelevisión
La factoría tuvo una plantilla de personal
fijo de unas 48 personas, incluyendo un capellán que hablaba español, alemán y
francés, ya que gran parte del personal era extranjero.
La fábrica en sus inicios necesitó de
operarios especializados para la elaboración del producto, pero se trataba de
una técnica pionera que no se utilizaba aún en España, por este motivo tuvieron
que contratar una treintena de técnicos alemanes al mando de dos ingenieros
suizos.
La fábrica estuvo en funcionamiento hasta
1788, fecha en la que cayó en el abandono convirtiéndose en un centro de
encuentro y escondite de bandoleros y contrabandistas.
A principios del siglo XXI la Antigua Fábrica
ha sido rescatada de su inminente ruina, restaurada y reconvertida en una
Bodega Artesana y Ecológica.
Dadas las características de la finca y el
número de viñas plantadas la producción está limitada a alrededor de 15.000 botellas
por añada (todas numeradas).
Y allí pasamos el fin de semana, pues dispone
de cinco habitaciones donde poder hospedarse después de una buena cena y su
respectiva cata.
Gracias al amigo Enrique actual propietario y
junto con un nutrido grupo de amigos suyos, pasamos un fin de semana
espectacular, pues si la visita estuvo bien, la compañía fue lo mejor, no hay
nada como un grupo de amig@s en una mesa disfrutando de unas copas de vino.
Y así dirá la historia que pasamos este fin
de semana.
El Domingo después de un buen desayuno muy
completo, dejamos a estos nuevos amig@s disfrutando de la estancia y a Enrique
que tan bien nos acogió....
Un reportaje de Lorenzo Andante para el Blog EL MOTERO QUIJOTE.
Arreglos para el blog de Albertakus.