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martes, 19 de septiembre de 2017

NAQUERA Almuerzo con los amig@s.



Haz todo lo que puedas hoy, porque nunca estarás seguro de cuando será la siguiente salida, o a lo mejor sí. No tienes la promesa de ver todas las estaciones de tu vida, así que vive por el hoy y di todas las cosas que quieras, que tus amig@s te recuerden, con la esperanza de que ellos aprecien y amen todas las cosas que has hecho por ellos en los años pasados.



Dedicado a mis viejos amigos






El tiempo tiene su manera especial de moverse rápido y tomarte desprevenido en el paso de los años. Parece que solo fue ayer que era joven, y embarcándome en mi nueva vida con mi Dulcilicia. Pero de cierta forma parece que fue hace mucho tiempo y ahora pienso, ¿a dónde se fueron los años?
Sé que los he vivido todos. Tengo visiones de cómo fue entonces y de todas mis esperanzas y sueños, de casi todos los lugares que hemos recorrido juntos
Pero, aquí está el paso de mi vida y "me agarra de sorpresa". ¿Cómo llegué aquí tan rápido? ¿Dónde se fueron los años? ¿Adónde se fue mi juventud?

Pero aquí está, mis amigos están retirados y volviéndose "grises", se mueven más lentos y ahora les cuesta más acudir. La vida nos golpea y a veces duro. Algunos están en mejor forma, otros peor, pero veo el gran cambio.





No por ellos que recuerdo que eran jóvenes y vibrantes, sino como yo, su edad se empieza a mostrar y ahora somos aquellas personas mayores que solía ver y que nunca pensé que sería. De todos los que estábamos en la mesa el más joven en salud es Jesús y Tere, y las mujeres que tienen el don de estar siempre bien, una mujer se ve mayor cuando entra en la edad de los 120 años, hasta entonces son un regalo de dios. Y a ellos les digo que disfruten que la vida pasa rápido, que nosotros nos estropeamos antes y antes nos atrapa la vida y nos quita la fuerza.

Así que ahora entro en esta nueva etapa de la vida sin preparación alguna para todos los dolores y achaques, y la pérdida de fuerza o habilidad para ir y hacer todas las cosas que quisiera haber hecho pero que nunca hice.






Pero, por lo menos sé, que aunque el cansancio me ha llegado y que no estoy seguro cuánto va a durar, esto sí sé que cuando se acabe en esta tierra, se acabó, pero lucharé para al menos seguir saliendo y viendo a mis viejos amigos.

Sí, tengo arrepentimientos. Hay cosas que hubiese querido no haber hecho, cosas que debí haber hecho; pero, de verdad, hay muchas cosas de las que estoy contento que hice.




Pero lo Viejo es bueno en algunos casos: Viejas canciones, Viejas películas, y lo mejor de todo, ¡VIEJOS AMIGOS!


¡Que estés bien, viejo amigo! y nos juntemos siempre que haya un aviso de cualquiera de nosotros para ello.


Un reportaje para el blog   El  Motero Quijote.

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